Lindsay, no te mueras: Caso de ética publicitaria - Luis Maram

Lindsay, no te mueras: Caso de ética publicitaria



Este anuncio llegó a las páginas de los periódicos en Estados Unidos la semana pasada. No tardó en convertirse también en un viral.

La cuestión es simple: aprovecharse del problema de drogadicción y alcoholismo de Lindsay Lohan para publicitar una clí­nica de rehabilitación.

La acción consistió en publicar el anuncio con la cabeza: ¡No te mueras Lindsay! (obviamente sin citar el apellido). Debajo de ello, en el cuerpo, se explicaba que el Instituto Canterburry, responsable de la publicación, era una institución que garantizaba la cura deadicciones con un tratamiento de tres dí­as.

Dejando de lado la situación de que parece bastante torpe o ingenuo creer que alguna clí­nica pueda librar a una persona de sus adicciones con un tratamiento de tan sólo tres jornadas, la acción de usar el nombre podrí­a ser clasificada como baja y abusiva. No obstante, el Canterburry Institute decidió jugársela. El resultado puede ser contraproducente o efectivo, eso lo decidirá el público norteamericano.

Lo que llama la atención es el hecho, cada vez más frecuente de utilizar el nombre o apellido de una celebridad para hacerse promoción a costa de ella sin pagar un centavo de regalí­as. Se trata de un debate creatividad vs ética, una diatriba que baila en el filo de la navaja de la legalidad y el buen gusto. La decisión es de ustedes.

Acerca del autor

Luis Maram

MBA, speaker internacional, Master en Inbound Marketing, especializado en Reputación corporativa. Estratega de contenidos; editor en jefe de este sitio enfocado a cómo crear contenidos que tu audiencia quiera ver, vivir y compartir. Consultas o conferencias de marketing.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.