No siempre Menos es más: Milton Glaser - Luis Maram

No siempre Menos es más: Milton Glaser

Milton Glaser, el genio diseñador del famosísimo logo «I Love NY», habla de por qué no cree en el axioma «Menos es mas».



Milton Glaser, el genio diseñador del famosísimo logo «I Love NY«, habla de por qué no cree en el viejo axioma «Menos es mas».

Desde mi niñez hasta la época moderna — señala el diseñador — he oído este mantra toda mi vida. Menos es más. Una mañana al despertar me di cuenta de que era algo totalmente absurdo y también bastante sin sentido. Pero suena muy bien, porque contiene dentro de sí una paradoja que es resistente a la compresión.Pero simplemente si te remontas a la historia del mundo la frase queda anulada, si nos fijamos en una alfombra persa, no se puede decir que menos es más porque te das cuenta de que cada parte de esa alfombra, cada cambio de color, cada cambio en las formas es absolutamente esencial para su éxito estético. No puedes convencerme de que una sólida alfombra de color azul es de algún modo superior. Esto también va para el trabajo de Gaudí, miniaturas persas, el art nouvea y todo lo demás. Sin embargo, tengo una alternativa a la propuesta que creo que es más apropiada. “Sólo lo suficiente es más”.

En este marco me encontré este juego de cubiertos para mesa, obra de Mark Reigelman… Cualquiera diría que un tenedor o una cuchara son la máxima muestra de funcionalidad y poco se puede hacer para mejorar su diseño; pero ¿y si agregamos quitando? Los cubiertos son para llevar comida a nuestra boca y morderla ¿Qué pasa si lo que añadimos entonces son… mordidas?

Un bello diseño, una extraordinaria paradoja que esta noche me hizo recordar a Milton Glaser y su manera de romper paradigmas regalándonos su propia visión: No siempre menos es más… Sólo lo suficiente es más. [tti link=» Twittea esta frase»]No siempre menos es más… Sólo lo suficiente es más: Milton Glaser[/tti]

Acerca del autor

Luis Maram

MBA, speaker internacional, Master en Inbound Marketing, especializado en Reputación corporativa. Estratega de contenidos; editor en jefe de este sitio enfocado a cómo crear contenidos que tu audiencia quiera ver, vivir y compartir. Consultas o conferencias de marketing.

4 Comentarios

  • Ok, este ejemplo no creo que sea muy adecuado. ¿Tiene alguna función o motivo por el cual agregarle mordidas a los cubiertos? Son mas confortables? El cuchillo corta?.

    Si no, eso es mas bien arte. Creo que es un pésimo ejemplo del «menos es más» habla de funcionalidad.

  • El diseño es la suma de estética y funcionalidad, y tanto peso tiene una como la otra. En este caso, el sentido estético se enriquece enormemente y la funcionalidad permanece. A eso se refería justamente Glaser… podríamos haber dejado los cubiertos como herramientas simples y meramente funcionales, pero al agregar estos elementos de diseño se crea un objeto aún más rico.

  • Creo que anular una frase en base a 1 solo ejemplo es como negar la simple existencia de mi ser solo por no poder encontrar un espejo. La frase es aplicable a diversos temas y no por ello se debe anular su sentido. Un ejemplo, en internet las personas escriben blogs y microblogs y su éxito en internet radica en que sean cortos y directos, ya que si se escribe demasiado o damos muchos puntos de vista terminamos tal vez aburriendo al lector de internet. En este caso es mejor escribir menos para captar más lectores. Para finalizar, cuando me ha tocado exponer temas a jovenes estudiantes, mis colegas me pedian que durase 1 a 2 horas, pero yo siempre lo aplicaba en menos de 40 minutos y los estudiantes me manifestaron siempre que prefieren menos palabras y más contenido.

  • Coincido con Alejandro, este es un ejemplo perfecto de como el «diseño» anula la funcion…basta fijarse en la cuchara para ver que no es mas que un adorno, la mordedura ha anulado su funcion principal. Otro tanto ocurre con el cuchillo, el efecto intruduce una debilidad estructural en el lugar en donde la herramienta esta mas comprometida a esfuerzos propios de la funcion de cortar, y ni que decir del caso en que este cuchillo necesite un futuro afilado, simplemente desapareceria. El unico que mas o menos sale bien parado es el tenedor. De todos modos me parece una idea tautologica.
    Que el diseño sea la suma de estética y funcionalidad es en principio relativo. En primer lugar, porque asi como lo expones, parecerian dos entidades bien diferenciadas que dotarian de entidad a un objeto, cuando basta ver un poco en la historia del diseño para encontrar innumerables ejemplos en donde la «estetica» es precisamente manifestacion visual de la funcionalidad y no un añadido que se superpone. Por otra parte la equivalencia en el peso de cada uno de los terminos tambien es cuestionable y merece precisarce. Un vestido de moda puede hacer prevalecer estetica sobre funcionalidad dado que el marco de produccion y recepcion historica de ese objeto, suele verlo en esos terminos; existe un consenso social que habilita al diseñador a actuar de ese modo, en ultima instancia, la «funcion» de un vestido, ademas de cubrir el cuerpo o abrigar, es tambien hacer ver bonito a quien lo porta. Con una herramienta, ocurre algo bien distinto…nadie le pide a un martillo que sea bonito o visualmente atractivo, lo cual por supuesto no inhabilita a que podamos pensar tambien en esos terminos respecto del martillo, pero dificilmente podamos encontrar a alguien que piense que un martillo deje de martillar, a menos claro que se trate de un diseñador, sin animo de ofender. saludos

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