Aquel que durante su juventud no odió la tabla periódica de los elementos es porque hoy se decica a la ciencia… o porque de plano no estudió.
Simplemente la iconicidad del terrible instrumento de estudio basta para provocar rechazo en muchos, incluyéndome. De allí que fuera una grata sorpresa encontrarme con este fantástico trabajo que hará las delicias de muchos diseñadores y les hará reconciliarse, al menos por un rato, con la exacta ciencia. En este diseño, aprovechando la estructura de la tabla, se ha hecho un compendio de fuentes tipográficas, ordenadas por ranking y familias (serif, sans serif, humanistas, grotescas, geraldinas, geométricas, etc.)
Cada uno de los cuadros de la tabla contiene: las iniciales o primeras letras del nombre de la fuente, el nombre, su número en el ranking, la clase o familia a la que pertenece, su diseñador y el año en que fue realizada.
Una auténtica joya para todos los diseñadores que seguramente la desearían como un poster; por esta razón, la resoilución del gráfico que se descarga después de hacer click sobre la imagen es bastante buena. Disfrútenla.